Lo más importante es mantenerte aislado al igual que los familiares o las personas que vivan contigo por alrededor de 14 días, no automedicarte, mantener reposo y vigilar que los síntomas no se compliquen.
Recuerda que la mayoría de los enfermos se recuperan en casa con reposo, alimentación e hidratación adecuada y supervisión médica.
Sigue estas recomendaciones: